Habia una vez...

hace muchos muchos años, antes de que los dinosaurios incluso, vivian en la Tierra Pasiones y Virtudes que se aburrian de lo lindo con el transurrir de los años. Normalmente buscaban con que entretenerse y casi siempre era la Imaginacion quien proponia estos juegos.Un dia la Imaginacion propuso jugar al escondite, a todos le parecio buena idea pero quien queda? -Yo!Yo!- dijo la Locura -Pues date la vuelta contra ese arbol y empieza a contar hasta cien.- dijo la Imaginación. Y asi fue como la Locura empezo a contar una cuenta loca. -2, 5, 36, 22, 36,... Y asi una a una todas las Pasiones y Virtudes buscaron un lugar donde esconderse, la Belleza decidio esconderse en un prado lleno de tulipanes, la Imaginacion en medio de las nubes, la Esperanza en un hermoso prado verde, la Pereza no fue muy lejos y se quedo detras del arbol, y asi uno a uno se fueron escondiendo todos menos el Amor. La Locura seguia contando, pero el Amor, es un indeciso y no sabia donde meterse. -57, 89, 12, 35, 100, Voy!-grito la Locura, el Amor se metio a toda prisa en medio de unos rosales. La Locura a quien primero encontro fue a la Pereza, siguio buscando y fueron apareciendo todos, todos menos el Amor. Ya cansados del juego la Locura empezo a gritar. -¡Amor sal ya! Como ya te dije, el amor es un indeciso... -Amor sal ya, se hace tarde!- seguia gritando la Locura. La Envida que siempre piensa mas en si misma que en los demas se acerco a la Locura y le dijo muy bajito al oido: -El Amor esta escondido en aquellos rosales. Asi que la Locura se acerco y le dijo: -Se que estas ahi. Sal ya!- pero el amor es a veces tan indeciso...Asi que la Locura metio la mano con tan mala suerte que se pincho con los rosales, porque como sabes hacer salir al Amor a veces es doloroso. Asi que cogio un palo y lo metio entre los rosales y de repente se escucho un grito: -Ay!!! Era el Amor, que salio de los rosales con las cuencas de los ojos ensangrentadas, todos estaban asustandos, nadie sabia que hacer ni que decir, fue entonces la única vez que la Locura habló con un poco de cordura y dijo: -No os preocupeis, a partir de hoy yo seré sus ojos. Desde entonces que se dice que el Amor es ciego y va acompañado de la Locura.